Quería contar mi experiencia sobre la maternidad, pero no puedo porque no hay bebe. Es una maternidad diferente. Una maternidad no reconocida, una maternidad silenciada.
A pesar de que me he dado cuenta que mi entorno no ha olvidado, y me deja hablar de ello si sale el tema. Pero aun así es difícil, porque sigo sin saber hasta que punto alargar la conversación o sincerarme.
Vuelvo a callarme, a dejar pasar los días y a no hablar de ello. Pero necesito seguir recordando a mi bebe, necesito seguir sabiendo que siempre estará ahí, por eso me hago pequeñas cosas para mi. Y para él.
En nada es el día de la madre, y se ha cumplido un año de mi primer regalo del día de la madre. Este año no hay bebe y nadie me dirá feliz día de la madre. Solo me quedara mirar mi planta que aun sobrevive y recordar lo bonito que fue, las sonrisas y felicidad que había ese día.
Aunque el día de la madre este año es el día 7 yo lo digo ya.
Feliz día de la madre, en especial a esas mamas con sus brazos vacíos, esas mamas valientes que luchan cada día.
Porque yo si me acordaría de todas y os diría feliz día mamas. Porque a pesar de la tristeza también merecemos que nos deseen un feliz día.
Y mi regalo por el día de la madre del año pasado me regala justo después de un año, una nueva flor, la primera que crece desde que esta conmigo.
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